Hoy he comenzado a impartir en la Universidad de Málaga la segunda edición del curso «Redes sociales para la docencia y la investigación». La actividad está organizada por el Servicio de Formación del PDI (Personal Docente e Investigador) de la UMA. Podéis seguirnos en Twitter con el hashtag #CursoRedesUMA.
El curso se está desarrollando a través del debate y el contacto directo con distintas redes sociales. Uno de los primeros aspectos objeto de discusión está siendo si las redes sociales pueden ser significativas en la educación universitaria y si pueden ayudarnos a mejorar nuestra actividad docente. A continuación, enumeraré diez motivos por los que considero que el uso de las redes sociales en este contexto no sólo es pertinente, sino que también es relevante. En siguientes entregas profundizaré con vuestra ayuda en varios de estos aspectos.
En mi opinión, en la enseñanza universitaria las redes sociales pueden servir para:
3. Fomentar entre lxs estudiantes actitudes activas hacia sus procesos de enseñanza-aprendizaje.
4. Fomentar el desarrollo por parte de lxs estudiantes de competencias y conocimientos de tipo transversal.
5. Mejorar y dinamizar las labores de tutorización del alumnado.
6. Propiciar actitudes de aprendizaje permanente, tanto en el profesorado como en el alumnado.
7. Estimular la coordinación docente.
8. Facilitar el contacto entre la Universidad y otros ámbitos del mundo profesional.
9. Desarrollar actitudes emprendedoras, tanto a nivel personal como institucional.
10. Fomentar el liderazgo de la universidad en los nuevos espacios de interacción y transferencia de conocimiento e incrementar la cientificidad del conocimiento transferido en estos espacios.
Y tú ¿Tienes experiencia, como profesor o estudiante, en el uso de las redes sociales en la enseñanza universitaria o en otros contextos educativos? ¿Qué piensas que puede aportar la utilización de las redes sociales en la enseñanza universitaria?
(Contra)Punto de fuga 
Estos son los principales motivos que ahora mismo veo, pensando más en el profesor que en el alumnado. Pienso que quizás se debe a que hasta ahora no he utilizado estas herramientas en docencia:
6. Propiciar actitudes de aprendizaje permanente, tanto en el profesorado como en el alumnado.
9. Desarrollar actitudes emprendedoras, tanto a nivel personal como institucional.
Fernando
¡Gracias Fernando! Aunque no hayas usado aún estas herramientas en tu docencia, tu experiencia docente es amplia, así que me interesa mucho tu opinión. Intentaré desarrollar pronto esos dos puntos que señalas, con nuevas entradas.
Desde mi punto de vista lo importante es que haya al menos un buen motivo y que, partiendo de él, desarrollemos una primera acción-actividad concreta.
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En una sociedad postindustrial no tiene demasiado sentido mantener estructuras de aprendizaje propias de una sociedad industrial, hemos de superar una docencia, un aprendizaje unívoco y aprovechar las extraordinarias posibilidades que nos plantean las redes sociales no ya como vehículo de aprendizaje sino como parte intrínseca del propio aprendizaje.
Hemos de cambiar de paradigma educativo y ser conscientes de que el aprendizaje está tanto o más fuera que dentro de las aulas: el aprendizaje ubicuo, el aprendizaje entre pares, el aprendizaje colaborativo, el desarrollo de los entornos personales de aprendizaje (PLE), el enriquecimiento de las red personal de aprendizaje (PLN), el portafolio digital son conceptos que, queramos o no, suponen componentes esenciales que favorecen los procesos de aprendizaje.
Desde esta perspectiva no tenerlos en cuenta desde el rol tanto del docente como del discente va a suponer acrecentar la fractura existente entre el «mundo educativo» y el «mundo real» por lo que no cabe mas que plantearse el interrogante ¿estamos dispuestos a que el «tsunami» nos pase por encima, o vamos a prepararnos para que los daños sean minimizados al máximo?
Sigue el debate…